domingo, 30 de septiembre de 2012

Como el sol entrando a la avenida.


Desde donde estoy, las ramas de ese árbol se ven muy bien, con el sol a contraluz… Pero espera, también estás tú, sentado a mi lado. No te veo muy bien, pero siento tu presencia. Tomo tu mano y la pongo en mi cara, para sentirme quizás mas contigo, ya que no te siento lo suficiente.

Vayámonos de aquí, no me siento a gusto, ni tampoco cómoda. Hay un ambiente extraño y tenso…. Definitivamente quiero tomar algo, un vodka no vendría nada mal.

Solo caminas, sin mirar a ningún punto fijo y, claro, yo no dejo de mirarte. Cruzo la calle y el sol me llega directamente a los ojos y dejo de ver por un momento, te pierdes.
Después de un tiempo, vuelvo a mí. No me gusta esto, pensamiento libre que vuela cuando quiere.

-Oye… ¡Oye!
-¿Qué?
-Concéntrate por favor
-Perdóname, me pierdo.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

no es nada


-¿Frío?
-No
¿Calor?
-Tampoco
-¿Qué sientes?
-No lo sé… Realmente no lo sé. Adormecimiento quizás.

Estoy acostada en mi cama, mirando el techo con la mirada vacía, creo que sin ningún sentimiento. Tampoco se como me siento y eso hace que me angustie mas.
Supongo que está sonando música…My girl, my girl, don’t lie to me, tell me where did you sleep last night. In the pines, in the pines, where the sun don’t ever shine. I would shiver the whole night through...

No tengo la voluntad para levantarme, pero tampoco me quiero quedar aquí, esto es deprimente y hasta un poco denigrante.
Puedo ver a través de la cortina la luz, blanca y tenue, la cual alumbra con un tono azulado todo el lugar.
Sigo mirando el techo, como tratando de salir con el pensamiento, pero no tengo la suficiente concentración como para imaginármelo y que termine siendo creíble.
Lo más probable es que necesito un poco de ese algo para sentirme mejor… Maldita mente.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Compañía Psíc.


Llevo caminando horas o por lo menos así lo siento, exactamente no sé donde estoy, pero creo saber a donde voy. La hora es… no sé, no me interesa saber tampoco.
La música suena fuerte en los audífonos, pero me agrada, así quiero que sea, solo yo. Estoy muy distraída, ni si quiera siento mis pies en el piso cuando camino, lo único que logro sentir es el viento, pero muy leve, la verdad, no me siento en mi, no estoy aquí…

Espera… ¿Por qué te apareces?, no deberías entrar a mi mente así como así. Bueno, si quieres quédate, me gusta tu “compañía”. Estás y no quieres irte, no se supone que pase esto, pero… Es lo que pasa, no me lo explico. Pensando en eso, se me olvida que caminaba o que estaba en alguna parte, mierda, no he caminado nada, me queda bastante, bastante tiempo para pensarte.

Ya casi, no se la hora, pero tengo que irme. Miro por si estás cerca, uno nunca sabe, podrías estar por aquí, solo quiero eso, encontrarte por ahí, en algún lugar. Me doy un par de vueltas , solo quiero corroborar que no estás, además, cada vez son más mis ganas de caminar…
Me mareo, pero siento la necesidad de seguir y no parar. Quiero un cigarro, solo uno, quizás más, no lo acostumbro, pero tengo la necesidad de.
Sale la chispa, luego el fuego, saco el cigarro y lo pongo en mi boca. Lo prendo lentamente, como también trato de disfrutarlo, sentir el veneno del humo, solo un poco.

Quiero llamarte, créeme que lo haré, solo para saber donde estás, no creo que cerca. Pero si no fuera así, necesito un poco de compañía… Por favor aparece.