jueves, 29 de agosto de 2013

Un siglo y una noche

En cada momento que pasa se mantiene la importancia de la música. Grimes nos grita en el oído, provocando un ambiente con olor a éxtasis...See you on a dark night. And now another clue i would ask. If you could help me out...
EL día parece noche y la noche día. Caminamos al revés y el vino nos humedece los labios constantemente. NOCHE ILUMINADA, pero la luna llora.
Mientras las energías se funden y se atraen mediante polos opuestos, yo te miro, te miro y quiero fumar. Te miro y quiero irme. Te miro y preferiría tu boca en otro lugar; un lugar en donde estés conmigo.
No sé en qué volá de la noche mi mano está en tu cara, con fuerza, me duele. Bajón culiao, no sé qué pasa. Volviste¡hijo de puta! no tenías que estar aquí, menos ahora. Te grito que te odio y espero que me escuches, sabiendo que en realidad no es así, pero el vino gritó. Otra persona se expresa ahora, jamás yo, jamás tú, jamás nadie es lo que realmente es.
Ya, hora de acostarse. Más jugo no puedo dar. Necesito, como siempre, otra vez, un cigarro; el que sea. La luna llora otra vez, pero la diferencia es que ahora hay estrellas que se comunican conmigo. Por su puesto aparece esa mierda en el cielo, que no tiene la culpa, pero no importa, nada importa. Hay un aire eléctrico y eso me permite cerrar los ojos, hundirme en mí y concentrarme en el sonido del lugar, en el murmullo de tus pensamientos, en la deshidratación de mi cerebro y en tu mano sobre la mía. Puedo escuchar tu pulso y tu respiración, más cerca que todas las respiraciones del tiempo universal. Estás cuidando inconscientemente la debilidad de mi sentir.

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