lunes, 10 de noviembre de 2014

Pensamientos alineados

"Los pasos al unísonos por esas calles recurrentes que nos observan desde hace años.
El universo advirtiéndonos desde siempre que estaríamos unidos en algún lugar de nuestros recorridos.
Tenerte conmigo como un amuleto de surte y deseo, de ansiedad y amor, de sentimientos nuevos y experiencias alucinantes.
Ya eres parte de mi"

El fuego prendió al igual que nuestras almas al momento de conectarnos. Una noche agradable con aire cálido. El sonido del río como una dulce melodía en nuestros sentidos. Nuestros cuerpos que no permiten el paso del frío. Las estrellas que nos miran luminosamente gracias a la ausencia temporal de luna.
Te miro y me cuesta creer el contexto tan perfecto en el cual nos encontramos atrapados y hundidos.
Te miro y la inmensidad en mi pecho es igual a la de los cerros que nos han rodeado durante todas nuestras vidas.
Te miro y guardo esa imagen con la luna saliendo de tus ojos en mi memoria inconsciente y eterna.
El vino se convierte es un diálogo interminable con ideas rebuscadas y muy ocultas en nuestro pensar.
Se convirtió en verdades, en sueños, en filosofadas de la vida cotidiana y el futuro que no podemos predecir.
En lo nuestro que todo lo puede y en lo de ellos que no puede destruirnos porque sabemos que todo es falso, todo es ambición, todo es maldad.
Pasa el tiempo como si no lo hiciera. Se desordenan las horas y me desoriento.
Ese cigarro placentero, la luna hipnotizandome y tu cuerpo hundido sobre el mío. Sabes lo que pienso, no debo decir nada.
Descansa conmigo en mi sueño profundo, no me sueltes, siente mi pulsar, permanezcamos envueltos en este capullo de amor hasta que los primeros rayos de sol abracen nuestros cuerpos con un calor sofocante pero de alguna forma reconfortante.
Caminemos juntos, exploremos el mundo, compartamos experiencias. Háblame como sabes que me alivia,sólo sé y está. Finalmente, todo lo que proviene de ti me gusta.

martes, 7 de octubre de 2014

Es-la-que

La pendeja fumeta, la que entrega de corazón, la buena pal' hueveo, la que lee, la que habla, la que quiere, la que ama, la que te ama, la que "te todo", la que vive en los astros, la que viaja sin moverse de lugar, la que sigue leyendo, la que escribe, la que cae, la que sube, la que sigue fumando, la que cuestiona, la que tiene ansias de saber, la que vaga por las calles solitarias de una ciudad fantasma, la que mira a los ojos, la que es diferente, la que es igual a todos, la que sonríe, la que existe aquí y ahora, la que no existe en ningún lugar nunca, la que usa converse, la que se viste de colores, la buena pa' tomar -vino, chela, pisco-, la que escucha a los Beatles con todos los sentidos, la que es tuya, la que te hizo de ella, la que te iluminó, la que te mostró otro mundo, la que te cuida, la que te observa mientras duermes, la confundida, la segura, la que tiene un alma vieja, la eterna enamorada, la que no te olvida, la que siempre tiendes a recordar, la que escribe ésto en un café solitario a medio día con música de fondo.

No me falles, nunca

Nuestros cuerpos moviéndose sincrónicos
al son de la oscuridad, a mi hora favorita.
 Tu boca tratando de buscar la mía,
casi en un acto de desesperación y necesidad compulsiva.
Yo te necesito, toco tu cuerpo tan potente y no lo puedo creer;
viajo a otros mundos
y me impresiono de lo magnéticos que podemos ser juntos.
Siento una inmensidad en mi pecho,
una sobrecarga emotiva que desborda mi corazón
y siento cómo quieres decirme todo sin abrir tu boca,
sin pronunciar ninguna palabra;
lo guardas todo para el final,
para la hora de separar nuestras pieles imantadas
y sepultar como cadáveres
nuestras ganas de vivir así
para toda la eternidad.
Siento impotencia  y angustia incontrolables, tenerte tan lejos siendo que sólo nos separan un par de insignificantes paredes.
Me cuesta despegarme de tu imán positivo. Dejar de sentir tu calor, tan humano. Tus manos tibias en mi espalda. Las piernas entrelazadas. Tu pulso tan desigual y particular. Escuchar tus sueños y calmar mi ansiedad.
Debo dejarte, mi cuerpo y mi mente están cansados. Me detienes con ánimos de declararme- en la borrachera del momento- tu amor eterno, tu compañía incondicional.
Tus labios sólo pronuncian un par de palabras, pero tu alma sale por tu boca para recubrir con sutileza mi corazón enamorado, con una unión simbólica y espiritual inquebrantable.
Nuestras almas cada vez se unifican más, seguimos en línea recta.

martes, 23 de septiembre de 2014

Confesiones de un típico curao

Ver a toda mi familia de alma junta, compartiendo unos con otros sus ideas infinitas y su oxígeno, sin ningún prejuicio, sin ninguna idea previa. Mi familia del corazón. Mandalas en mi corazón, en tus cortinas y en mi vida.
La frutilla endulza mi mente y el vino contrasta con su acidez. Lo necesito, estás tan cerca, muy vivo.
El fin, de mi creatividad y de mis deseos. Deseo tu boca, tu piel, tu amor.
Ser la mina de tu vida y tú eres mi vida, ¿por qué más simple que eso?...

Casi chocolate.

Es que no te imaginas cómo se me derrite el corazón en las manos cuando te veo cerca, cuando estás por venir, cuando me miras así, cuando eres parte de mi todo y puedo ser parte de lo tuyo, cuando duermes, cuando me recuerdas lo unidos que estamos, cuando le pones dedicación y corazón a algún momento o situación, cuando compartimos risas y son-risas, cuando me llenas de palabras delicadas como flores, cuando eliminas -sin saber- mi noción del tiempo, cuando creas un ambiente con secuencias perfectas y banda sonora, cuándo compartimos el tiempo y los atardeceres se vuelven majestuosos -mágicos-.
En definitiva, eres todo complementado a la par con el universo y mis deseos. Somos nosotros.

Me resisto a despertar.

"Detén el tiempo en tus manos
Haz esta noche perpetua
para que nunca se vaya de mi,
para que nunca amanezca."

Me sueño sentada en una ventana dentro de un roquerío que da hacia un eterno vacío. Detrás de mí estás tú, estático, no dices nada. Abajo están mis miedos, mis dudas y mis pesadillas. Me lanzo al vacío en un ataque de impulso, pero por alguna razón mis pies no llegan al fin; a la oscuridad. Tú estás con la energía opuesta, no podría llegar a existir algún tipo de amargura en mi sueño.

20:40 pm
Terminal, ningún bus. La luz blanca y fluorescente me hace sentir un mal estar en el cuerpo, como un extra gravitatorio. ¿Por qué me baja la nostalgia cuando ya estás lejos de mi alcance temporal? ¿por qué me arrepiento de actitudes baratas e innecesarias cuando ya es tarde para revertir la situación? ¿por qué mis días tienen polaridades tan distintas respecto a mi fluir?
Tengo una sensación estancada que aparece algunos días, generalmente si son nublados. Sólo no sé qué pensar, no sé qué hacer, no sé cómo me siento y eso me aflige. Todo esto me carcome el cerebro pero tampoco quiero ser mala compañía, neutra y marchita como clavel de cementerio. Soy contagiosa con mi estado frío, te hundes vulnerable en mi delgada capa de indecisión que irradio a centímetros de mí. Quieres sacarme de ahí, de aquí, de mi propia confusión, del lado más oscuro de mi mente en el cuál no quiero caer nunca más.
Sólo son días, no es un estado permanente que marque el transcurso de mi vida como una herida infectada y oxidada. Al contrario, cuando mi mente emigra de ese manto negativo mis brazos se abren como pétalos de girasoles con los primeros rayos de luz en la mañana y siento al universo dentro de mi cama al despertar, casi como si me arropara con su inmensidad.

Esta sensación debe ocurrir porque no dormimos juntos hace unos días y ya se me acaba la carga semanal de serotonina que me das cuando despierto y me doy cuenta, como ahora, que todo lo del precipicio fue un sueño, que el terminal es un invento de mi mente en estado REM y que ahora eres lo único real-ficticio que está en mi cama, arropándome con la inmensidad de tus brazos y piernas. Me impresiona lo espacialmente especial que eres, más aun siendo mi cómplice... Porque eres y serás para mi alma una día de sol, eso eres tú.

Sólo un pensa-senti-miento

Por esos colores hipnotizadores de los mandalas que te hice.
 Aunque tengas una leve adicción por terminar o seguir las cosas que no concluyes.
 Porque cada vez que me pierdo me encuentras -literalmente-.
Compartimos el tiempo de forma equitativa.
Porque fomentas mi lado más creativo, donde creas imágenes y sueños, inconscientemente. 
Tan pleno, tan luminoso, tan yo -de alguna forma-, tan nosotros, tan tranquilo al dormir
y yo me pierdo desvelada en la inmensidad de tu ser con los primeros rayos de luz.
No te mueras tanto y yo me mataré menos.
Mantente cerca, respira y late como siempre lo haces.
No dejes de irradiar esa energía tan especial cuando compartimos el tiempo.
Confía y yo haré todo lo que el universo me permita.
Por ser el ser humano que más conozco
cada rincón
cada lunar
cada poro
cada beso
todo lo he investigado minuciosamente, 
saciando mis ganas de ti, 
guardando el cariotipo de tu cuerpo.
El olor
de tu cuello
de tus hombros 
de tu respiración
de tu pelo
de tus sábanas
del oxígeno que hay
de la noche
y de tus ojos abriéndose para reflejar
la inmensa felicidad
que me da el despertar contigo.
Nuestras especies siendo compatibles.

miércoles, 30 de julio de 2014

Vacaciones en el más allá.

"El caminar kilómetros durante toda tu vida te hace creer que algún día llegarás al fin de todo"

Día 1
El trayecto fluye como debe. Nos llevaron el tiempo suficiente y caminamos lo que no creíamos. Llegar aquí es como viajar en el tiempo hacia el pasado, pero contigo es más especial. Los árboles, los olores y hasta el río siguen igual, nada cambió.
Un lugar tranquilo y bonito es suficiente para descansar. Podemos dormir dentro del río si es necesario, contigo el frío es algo que no conozco; para mí, es ausencia de ti.
Es como si el tiempo no fuera junto al movimiento del sol, es como si el sonido de agua fuera lo único importante que disfrutar, es como si las estrellas quisieran dar algún mensaje muy importante, es como sentirte tan cerca y tan unido a mí, es como si no necesitara nada más.
Subimos hacia un punto de concentración energética tan potente que siento como los cerros se agrupan por tamaño, por color y por intensidad. Los puntos luminosos del cielo nos comprueban que el pasado es el presente para algunos y que el futuro es algo incompleto, desconocido. Las estrellas fugaces conversan entre ella creando diálogos extensos y complejos. Un poco de pisco aumentará mi capacidad para contactar antiguos espíritus y contactarme contigo, que estás perdido en la inmensidad del paisaje, como todos los demás.
Podría quedarme aquí para siempre y sobrevivir sólo con sol, agua, energía y tranquilidad.
No quiero desperdiciar la real conexión que existe en éste lugar y cambiarlo por un sitio distorsionado e incomprensible. La verdadera espiritualidad no se compra con nada, es algo netamente personal y único. No es un precio determinado, no es un montaje, no es personajes de farándula, no es estatus social. No vale la pena desperdiciar y contemplar lo rico que sabe éste vino cerca de una fogata, escuchando como avanza el río y partiendo nuestros labios con el frío.

Día 2
Un almuerzo-desayuno con una compañía desconocida y muy agradable. Lo bueno de volver a las cosas simples y primitivas; agua sana y fuego natural. El río aun suena vigoroso, con fuerza y determinación. Mi cuerpo me sigue demandando tu presencia, es algo que no quiero evitar.
El día pasó rápido, la luz se hizo presente unas pocas horas. Nosotros sólo quisimos dormir como todos, eliminar cansancio y dolores. Taparte porque sé que tienes frío, acercarme lo más posible porque creo que es lo que me pedirías, perderme en tus sueños porque así es como me gusta.
Me despierto con la urgencia de hacer algo que olvidé justo cuando te vi durmiendo. Volví a dormirme, no quise molestarte. Son las 6, quedan los últimos rayos de luz y recuerdo que tengo que comunicar mi existencia, ya que hasta ahora sólo los que me han visto saben de mí.
Es una bonita noche con la cual te complementas tan bien y ni siquiera eres consciente de ello. Tú sólo caminas y tomas mi mano; con eso estoy más que conforme.
Volvemos y preparamos una comida comunitaria desbordada de buena energía. El fuego nos ha salvado del frío, del hambre y de la oscuridad, a pesar de que mi vista ya se modificó, tus besos me alimentan y mi boca se hiere cada vez más con los cambios de temperatura.
El pisco y el vino pasan como agua por mi garganta, refrescandome, casi como reviviendome y matándome a la vez. Mi promesa de no dejarte nunca y la tuya de llevarme a salvo a la carpa para dormir profundamente. Siento que no te vas hasta que me duermo, quizás no es así pero lo creo, parecía algo lindo.
Cuando llegas creo escuchar que me preguntas si existe un lugar para ti aquí adentro; sabes que siempre hay uno en cualquier parte que esté yo.
Me perdí en mis vidas pasadas, volando con las estrellas y fluyendo con todo. Estoy completa, me siento en plenitud y en constante sincronía con el universo. La última imagen que tengo es la de tu cuerpo imantado al mío.

Día 3
Es temprano y el sol no alumbra. Las nubes cubren el cielo y espero que siga así para cuando nos vayamos.
No quiero irme, podemos quedarnos aquí si quieres. Aunque sea una idea irreal éste lugar aportó a cada uno y llenó de paz tres días de nuestra vida, los cuales marcaron alguna parte del mundo.
Me parece inolvidable que me preguntes cosas que están dadas por hecho y que aun así lo hagas; ya me tienes. Se me hace increíble estar llegando a mi casa, después de tanta paciencia.
La mejor forma de terminar el fin de semana es contigo, viendo cómo atardece, recordando canciones y fumando unos cigarros son sabor a ti. Realmente creo que cada día te quiero más.

miércoles, 23 de julio de 2014

Amor cósmico

Será necesario escribir cada principio y cada fin de mes, para tener una idea del progreso.
Escuchar una balada lenta de trompeta y saxofón.
Adecuar la luz para agregar un tono sepia y antiguo a mi desvelo.
Imaginarme en alguna calle iluminada solo con faroles, escuchando un tango que proviene de algún lugar no muy lejano.
Saber que afuera está lloviendo pero no poder asimilarlo.

Porque cada vez que me despierto en la madrugada es para saber que sigues ahí, durmiendo, en un tercer mundo y yo en éste, tan irreal a la vista pero verídico al tacto. Mirarte es mi pasatiempo favorito, mientras no sepas que lo hago; se vuelve más emocionante y casual.

La necesidad que tengo de endulzar mi cuerpo y mi mente para ser un placer en tu vida y lograr endulzarla también.
Que me falten la mitad de las palabras para explicarte cada vez en qué estoy pensando -porque a veces no lo sé y porque siempre tiene que ver contigo-.

Quiero encontrar la forma de hacerte brillar, de verte crecer y admirarte como subes cada vez más alto. Llévame contigo en cuerpo o en alma, en mente y en cuerpo, en vida o sin, queriéndote o amándote; sólo llévame.

Será la forma en que me miras cuando supongo no verte pero finjo.
O quizás sea en cómo late tu alma cuando estamos juntos.
Puede ser que sea mi energía que se vuelve más intensa cada dos minutos y contando.

Si sólo pudiera hacerte confiar, hacerte creer. El jamás no existe ya que algún día me voy a morir y si no es por eso, ya mis palabras dejan de tomar sentido, y cuando eso pasa es porque me doy vueltas en la misma idea, y luego de eso tengo que parar porque es bueno renovar y buscar nuevas razones para quererte más y necesito bastante espacio en mi cabeza para imaginar todos los viajes terrenales y espaciales que haremos algún día... No me olvides ni en un mínimo esfuerzo de recordarme.

viernes, 4 de julio de 2014

Las razones del por qué.

"Me resisto a escribir algo, es como si no quisiera hacerlo -la verdad es que lo necesito-.
Tengo flashbacks, las ramas del parrón se mueven y enredan, creando una ilusión óptica pa' la cagá -y ese árbol con ojos no para de mirarme desde ese día-."

El dibujo que hago con tanta dedicación, mi indecisión sobre algo que ni siquiera sé si va a pasar. El frío, las nubes oscuras, la lluvia estancada, tus manos en mi espalda, mis manos en tu pelo, mis ojos en los tuyos y los tuyos cerrados -en otro lugar, pero sabes que estoy aquí-.
La desesperación, la sensación de león enjaulado, lejos de su manada.
Mi corazón de piedra en el cajón de tu velador. Las letras juntas de forma armónica. Ese extraño cuenco tibetano que no puedo dejar de tocar.
Si me duermo descanso. Si me duermo pierdo. El que se duerme pierde.
El olor especial de tu piel. El olor de tu piel junto con la mía, complementándose y creando una atmósfera de paz.
La mirada esquiva que insiste en no fijarse, ¿o acaso no quieres fijarte en mí?
Mi letra más poética y el pulso más fijo. Nuevamente mi corazón de piedra.
Lo que me invitas a hacer, lo que me provoca de ti.
La lagartija en tu brazo y el hormigueo en mi cuerpo.
El día más nublado del año, del cual jamás me percaté.
La casa atemporal. El "nosotros" me recuerda a algo sin tiempo.
Tus latidos que no tienen tiempo, tanto así  que cada cierto tiempo verifico tus signos vitales.
-Podría morir ahora y estaría satisfecha-.
Mi cuerpo que cada vez de hace más liviano, la fuerza de gravedad que a veces olvida su participación en mi vida.
Esa seguridad al dormir tan cerca tuyo, esa necesidad de romper mi propio récord de besos en el día, esa desesperación que me da al sentir que mi cuerpo se hunde en el tuyo.
La sensación de caída libre entre sueño y sueño. Soñar lo que tú, antes de dormir. Dormir y soñar lo que yo, lo que tú, lo que ellos y lo que nosotros.
El síndrome de abstinencia durante la semana.
Conocernos de vidas pasadas.
Tu intento de indiferencia, ya que los míos siempre fallan.
El vértigo que siento arriba del trapecio y la adrenalina de saber que cada vez voy más lejos.
Los castillos en el aire que te construí antes y mi intento de lograr enraizarlos.
Y aparte de todo lo anterior, el cómo puedo pensar tanto en ti, en diferentes escenarios y formas, en tan poco tiempo. Esas y muchas más son las respuestas a tu típica pregunta: ¿Por qué me querí?

viernes, 16 de mayo de 2014

Almuerzo liviano-

Con ganas de correr, rápido.
Me siento liviana después de un almuerzo desbordado de moral.
El sol está brillando, intenso y el viento está tibio, me hiere los labios.
Hay muchos colores, me hacen sentir llena -devida-. Aunque cada mañana que me despierto no pienso en color, sólo ropa oscura, negra.
Por alguna razón -conocida- volví a lo mismo, hace tiempo no estaba aquí. Es un lugar conocido -más que-. Éstas sensaciones tan extrañas y confusas. La música, los días nublados, las manos heridas y heladas. Todo se convierte en un deja vù constante de cosas que han pasado y otras que no, es difícil.
Ahora me voy lo más lejos que puedo, lo más lejos de lo rutinario -que me aburre-. Fines de semana iguales, con la misma gente y la misma sensación con el copete -asesino-.

lunes, 21 de abril de 2014

Recuerdos al viento


Y llego el momento que temía, el momento que lloré cuando llego. Me dolió y me olvide. 
Zurcí mis heridas y mis pensamientos gastados, los recuerdos flotan y los hundo, quedan bajo toda mi ausencia, me muero y revivo. Escribo esto con un aire renovado.  -Limpio-. 
Diseco mis lágrimas para invernar palabras de desahogo, solo para otra ocasión que me traiga el viento. 
Ya nada puede apagar mis llamas, me quemo. Voy saltando en busca de la almohada adecuada a mis sueños, buscando algo más que eso.
Florecen emociones nuevas en mí, los espejismos se difuminan, solo quedan los espejos de mis ojos, de mi alma.
Y al final aprendí que el tiempo al viento siempre se termina de un manera, solo. Después de cada alegría, después de cada tristeza, después de algo nuevo. En una soledad absoluta.
Quizás vale la pena.. todo se lo lleva el viento, menos lo que quedo dentro.

http://lluviadecigarrillos.tumblr.com/

Pérdida de memoria temporal.

Salgo a la luz de las calles y no puedo evitar encandilarme.
Prendo un cigarro con un sabor especial, sabor a otros tiempos.
Admito que me emociono un poco.
El momento suena a cuerdas de guitarra tocadas melódicamente.
Estoy de verdad cansada, pero lo que estoy viviendo en éste momento es perfecto, mágico.
El sol me quema la piel y se nota, pero ni siquiera eso me saca del trance. El cigarro está maravillandome y no quiero perder la sensación.
Camino con paciencia, no hay ningún apuro. La tarde huele a eternidad, sabe a día fuera de tiempo. Se siente cómo los árboles se comunican entre sí y siguen la fluidez del viento, confiándole el movimiento de sus mili segundos. Ellos me hablan, sabemos que estamos conectados. -Déjate caer, déjate caer- y es imposible no hacerlo...

Pasto húmedo, viento tibio, silencio crudo.
Ojos cerrados pero abiertos, blancos pero a la vez negros.
Lo sé, son muchos colores. Son chispazos violentos. Me estoy desconectando, pero el viento tiene el olor de mi cigarro especial. Sensación placentera, de no querer despertar nunca más por mi propia cuenta. Y más que eso, es saber que todo se conecta armoniosamente, en conjunto. Es el momento perfecto, hermoso y delirante en el cual me conecto con el TODO. Pero pasa todo tan rápido y no puedo permitirlo. Quiero que todos los míos compartan esta sensación conmigo. Comienza una lucha en mi cabeza, me pierdo de a poco. Mi cuerpo vuelve a reaccionar, a sentir...

Hay olor a gas, en la cocina por su puesto. Es una casa parecida a la mía, no siéndolo (o puede que sí)
Está oscuro y sólo alumbra el satélite silencioso pero útil.
No recuerdo qué pasó. Tengo manos marcadas en el cuello, me duele la traquea. Sigue insistente el olor a gas, en la cocina, insisto. No puedo revivir del todo, algo me mantiene despegada de la realidad, con amnesia leve, sólo antes de despertar.
Vino sobre la mesa de centro, muchas botellas vacías, gente tirada en el piso, en los sillones, en la tina y en la alfombra. Colillas de cigarros, miles. Vomito en el piso, litros. Vasos sucios, ninguno.
Me tomo un líquido de dudosa procedencia que hay encima de la mesa. Está fuerte, vomitivo. Me mareo segundo después. Me siento en el sillón más cercano, al lado de un personaje conocido desconocido para mí, que obvio está raja. Lo noto muy agraciado, con un aire especial. No es un ebrio cualquiera. Pelo color magenta, que por cierto, es lo más raro del momento pero siento que no es lo importante. Torso desnudo, pantalones rajados. Duerme en calma, como tomándose su tiempo. Me da angustia, un nudo en la garganta y no me explico el por qué.
Suena Saeglopur en mi cabeza para elevar el momento. Él es un ser conocido -ahora que recuerdo- que me habla mentalmente, entre sueños. Puedo escucharlo, pero el olor a gas me tiene loca, más que aturdida, lejos de cualquier cosa que pueda tener algo de sentido.
Claro que tampoco tiene ningún sentido que tenga un girasol-giraluna marchito en la mano derecha, ni que éste tenga una tierna dedicatoria para mí. Ni que todo lo que veo ahora se sienta irreal. -Otros colores, otros dolores-.
Recuerdo mi cuello y sus marcas, no puedo moverlo. -Mejor no te muevas-. Todo está oscuro otra vez...

Salgo a la calle y está todo iluminado, me encandilo. Prendo un cigarro, que es PallMall, obvio.
Siento que alguien toma mi mano y me susurra al oído un "te sigo" tan dulce que es como de otra dimensión, de una desconocida, les repito.
Un girasol-giraluna marchito en mi mano izquierda.
Cigarro consumiéndose en mi mano derecha.
Un día atemporal.
Aire suave, primaveral, con sensación satisfactoria.
Esto es infinito, soy infinita.
Universo, seamos uno.


lunes, 14 de abril de 2014

Creyendo.

Creo que voy a intentar poner mis pies en el cielo
para que así, mis manos sientan la tierra, el agua y la vida.
Creo que me haré unas alas de papel maché
para reciclar todo el papel que no se usa.
Creo que con ellas puedo recorrer el mundo
cada vez que quiera.
Creo que el tabaco me quita el aire y la plata
pero, ¿qué puedo hacer?
Creo que el alcohol me convierte
pero créanme, es mi alter ego el que se manifiesta
El crédito es del.
Creo que debo quemar mi televisor
ya que es él el que me funde el cerebro
y me hace caer en sequía de inspiración.
Creo que es hora de irme de aquí
mi turno ya terminó.
Creo que me descubrí otra vez.
Creo que me encontré, ya no me siento tan sola.
Creí verte en la vereda de en frente
sólo lo supuse.

jueves, 20 de marzo de 2014

Con la bota encima.

Es el mismo lugar pero diferente, es una persona distinta pero parecida a otra. Son las mismas pulsaciones pero tienen razones diferentes. Es el mismo lugar, pero créeme que de un universo paralelo.
Todo parece ser parte de un extraño sueño, de esos inexplicables. Piensas que estás caminando por una calle cualquiera pero en realidad es todo una proyección de tu cerebro.
Todos quieren engañarte y confundirte para que haya un momento en el que pierdas el control y tus pensamientos dejen de fluir, de nacer. Justo después de ese cortocircuito estás preparado para ser un ente del sistema. Ellos se encargarán de darte una cordial bienvenida a la vida de esclavitud.

Con pies en el cielo y la cabeza en otro planeta.

El cielo crea de un momento a otro un remolino multicolor. Sé que me vienen a buscar, me lo dijeron esas mariposas de alas moradas y sedosas.
¿Por qué todo se derrite? me siento bien, todo es demasiado raro. Tus ojos azules explotan como una nebulosa.
La luna se ríe conmigo y me invita a subir a su mando negro; fue imposible decirle que no.
Arañas en todo mi cuerpo, "nada de esto es real". Cierro los ojos lo más que puedo. Veo mil colores, tus colores.
Su planeta es sólo agua, todas las estrellas y constelaciones brillan en ella. Es todo mágico, me fue fácil llegar tan lejos.
He perdido el control pero todo es tan hermoso e irreal. 
Caleidoscopios en todo el cielo.
Lo único que puedo pensar es que nunca había sido todo tan perfecto. Hasta el ruidoso silencio me acomoda
Estoy desnudo abrazando un árbol, ¿puedes creerlo? Veo a muchas personas pasar por al lado mío sin que yo les importe.
Creo que alguien me habla, suena como un vinilo. La luna ya no se ríe conmigo, el cielo está gris otra vez, estoy más sola que nunca.

Urano y Gricel